La voz de los invisibles

Siempre hemos planteado que entendemos a La Voz de Pucón como un espacio de participación ciudadana. Creemos que los ciudadanos de Pucón deben estar debidamente informados y por eso tratamos de darle el mejor periodismo que podemos.

Creemos que deben haber espacios para todos y por eso nuestros espacios están abiertos para manifestar posiciones, a veces inclusive que se opongan a nuestras propias posiciones editoriales. También entendemos que los ciudadanos necesitan ser representados y hoy es un día en donde nos sentimos que algo hicimos.

Cuando comenzamos a seguir las fallas eléctricas en nuestra ciudad  por parte de CGE y de las evidente falta de mantenciones a las líneas que recorren nuestro territorio (por sobre los efectos del conflicto indígena que desangra a la región)  lo hicimos siempre porque creímos que ustedes debían estar al tanto de lo que estaba pasando, también para visibilizar a los invisibles, a las pequeñas comunidades y comerciantes que estaban sufriendo por la falta de —a estas alturas—  casi vital elemento (con electricidad se mueven bombas de agua o refrigeradores). Eso nos hace sentir tremendamente orgullosos del rol social que como medio hemos asumido, con el cual nos sentimos tremendamente identificados porque nos da sentido y cumple una de las expectativas que teníamos al fundar este proyecto.

Hoy somos testigos del anuncio de la CGE en torno a que indemnizará a aquellos que se vieron afectados por los cortes y que lograron acreditar perjuicios en el contexto de la demanda colectiva impulsada, primero por el concejal Omar Cortez y luego por la municipalidad y el alcalde. Más de $60 millones entregados por la empresa para aportar a resolver el daño causado. Creemos que es algo que va en la dirección correcta, porque llegó el momento que las empresas se hagan cargo del daño que su falta de servicio y previsión de las crisis. Creemos que es necesario ir más allá, pero el resto deben hacerlo nuestros legisladores con mejores leyes en esa dirección. Nosotros, por nuestra parte seguimos comprometidos con lograr ser una voz, tenue quizás, pero suficiente para visibilizar los problemas e incentivar los cambios.