El impactante testimonio del estudiante violentado: “Al intentar subir al bus me apuñaló en la pierna”

• El fiscal leyó la declaración de la víctima en la audiencia de formalización de cargos que dejó en prisión preventiva al agresor, quien fue imputado por homicidio simple en grado de frustrado. 

(Hazte miembro de nuestro canal de Whatsapp y recibe las noticias primero)

La sala principal del Juzgado de Garantía de Pucón estaba, en los hechos dividida. Por un lado los padres de la víctima que terminó con una herida por arma blanca en una de sus piernas en un brutal ataque perpetrado fuera del Liceo de Hotelería y Turismo el jueves pasado. Y por el otro, los familiares del atacante. Y todos ellos escucharon el relato en la formalización de cargos en contra del agresor, quien quedó en prisión preventiva, que lideró el fiscal jefe de Pucón, Jorge Calderara. 

Y el crudo testimonio se hizo público por primera vez en la audiencia en la que Calderara imputó el cargo de homicidio simple, en grado frustrado, en contra del estudiante de cuarto medio del Complejo Educacional Carlos Holzapfel, identificado con las iniciales M. E. A. N. de 18 años. El testimonio fue tomado por funcionarios de Carabineros, una vez que la víctima, de tan sólo 15 años pudo salir del centro asistencial, donde le practicaron los primeros auxilios luego del brutal ataque que pudo costarle la vida. 

“En lo relativo a lo sucedido el día 27.03.2025, puedo señalar que ese día yo salía del liceo a eso de las 16:20 horas, y a penas salí a la calle me encontré con (nombre al victimario) quien estaba acompañado por (nombra al segundo implicado, quien fue formalizado solo por amenazas y quedó en libertad), pero sólo (nombra nuevamente al atacante)  acercó a mí y me dijo ‘¡Qué te pasa con la (nombra a una joven)!’, pero yo no lo pesqué y seguí caminando hacia la parada donde estaba el bus del liceo que nos traslada a Curarrehuе”, relató el fiscal, quien leyó textual la declaración del menor de edad.

En la misma línea el fiscal continuó con el testimonio: “Al llegar a la parada, que está a unos 20 metros del acceso al liceo, me percaté al mirar hacia atrás, que venía a la siga el (nombra al victimario), sólo. Al intentar subir al bus me apuñaló en la pierna izquierda, detrás de la rodilla y luego arrancó, pese a ello yo subí al bus y luego de unos segundos, me percaté que corría mucha sangre, por lo que me bajé del bus y me encontré con el Inspector, quién me prestó los primeros auxilios y luego me trasladó en su vehículo al hospital de Pucón”.

Luego de la lectura de la declaración el fiscal solicitó la prisión preventiva para el imputado. Pese a que la defensa se opuso y pidió que sólo se lo dejara con arresto domiciliario parcial, para que pudiera ir al colegio y no le fuera negado el “derecho a estudiar”, el juez Fernando Pacheco no atendió los argumentos de la abogada del imputado y decretó la prisión preventiva y dio un plazo de dos meses de investigación. En medio de esa discusión, el fiscal Calderara (quien realizó una muy sólida presentación), calificó la acción del sospechoso como una “agresión cobarde”, realizada con “una frialdad notable e inexplicable”. 

Padre de la víctima

Al terminar la audiencia, el padre de la víctima, habló con este medio y se mostró  notablemente choqueado por lo que escuchó en la audiencia. Con todo, dijo sentirse más tranquilo con el resultado de la diligencia. “Esto (la formalización y la prisión preventiva del agresor) me deja más tranquilo a mí y a sus compañeros que vieron cómo lo atacaron y cómo sangró”, sostuvo el papá, quien agregó: “Cuando me llamaron y me dijeron que habían apuñalado a mi hijo, me imaginé muchas cosas y cuando llegué y lo vi, lo vi más estable; pero cuando vi sus ropas y pertenencias todas llenas de sangre, fue chocante para mí y para su madre”.

Sobre lo que viene ahora para su hijo en el colegio, el hombre reconoce que le asaltan muchas dudas: “Uno se replantea mil cosas porque uno quiere lo mejor para los hijos y no queremos esto. Cualquier papá o mamá no va a querer que su hijo llegue herido a la casa o que lo maten. Es algo que nadie espera y no es algo normal. Estamos muy mal como sociedad”.