Los baños públicos de Caburgua

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Señor Director:

Me dirijo a usted como vecino del sector rural de Caburgua, vivo en Playa Negra a 50 metros del lago, por lo que día a día soy testigo de situaciones que no deberían darse en un balneario que recibe turistas durante todo el año.

Una de estas situaciones es la vergonzosa realidad de los baños públicos ubicados en Playa Negra, pues aparentemente no tienen un horario fijo de funcionamiento, ni días establecidos para tal efecto, y por lo tanto pueden encontrarse cerrados cualquier día de la semana, ya sea hábil o fin de semana; lo cual va en desmedro de los turistas que visitan nuestra localidad, pues no cuentan con algo tan básico como un “baño” decente disponible.

Aparentemente los baños públicos estos días han estado cerrados por deuda de agua potable. Esto, además de ser una situación impresentable que compete directamente a la municipalidad de Pucón es una muestra de desidia hacía la comunidad y  los turistas, y es claramente un agravio a nuestra Localidad, siempre relegada por parte de la administración municipal.

Por otra parte, nos encontramos frente a problemas adicionales tales como: las personas que ingresan en vehículos motorizados a la playa; las personas que pernoctan en las riberas del lago a vista y paciencia de todos, situaciones que se han dado durante todo el año, y ya son habituales, pues no existe de fiscalización y control permanente. Como residente, me preocupan estas situaciones, respecto de las cuales la autoridad no ha intervenido ni tomado acciones correctivas. 

Es necesario señalar que nos encontramos en primavera, temporada baja para el turismo, y en razón de esto, nos visitan variadas delegaciones todos los días, siendo las de adultos mayores y de estudiantes las más relevantes. Al día pueden llegar 2 ó 3 buses, y están un par de horas en Caburgua. En algunas semanas más comenzará la temporada alta y por tanto la llegada de un gran número de turistas, y todo lo señalado nos afecta como foco turístico, en temas de seguridad seguridad, y no menos importante, en que los visitantes y nuestras familias puedan disfrutar del mejor modo posible.

Dicho esto, debemos hacernos una serie de preguntas básicas respecto a situaciones que afectan al turismo que es lo que impulsa la economía local: ¿volveríamos a un lugar donde no existe baño o funciona cuando así lo dictan las estrellas? ¿Pagaríamos una el uso de baños que se encuentran en un estado deplorable? ¿A la municipalidad le importa realmente Caburgua y el turismo que es su motor de desarrollo? Estas interrogantes por lo pronto dejan un muy mal sabor de boca.

Caburgua debiese ser un lugar seguro, limpio, ordenado y con servicios básicos durante todo el año, la comunidad es muy activa en términos de escalar los problemas y ser además parte de la solución de estos, pero es el municipio el llamado a liderar para que las acciones se concreten, como vecinos, estamos maniatados y sólo podemos escribir una carta para visibilizar estas problemáticas.

Espero que lo planteado ayude a las autoridades a tomar conciencia y a realizar las gestiones necesarias para dar solución a problemas que hemos escalado durante mucho tiempo, sin resultados positivos.

Atentamente:

Marcos Espinoza Maldonado