Educación municipal y oportunidades de desarrollo

*Por Sebastián Álvarez

No sé si están tan claras las cifras del déficit real de vacantes en matrículas en niños residentes en Pucón, en establecimientos de educación reconocidos por el ministerio de Educación. Lo que sí queda claro es que tenemos que hablar de educación y comenzar a pensar en cómo lograr que los niños de Pucón, en especial los niños de los sectores más vulnerables, tengan un futuro prometedor en igualdad de condiciones tal como todos los demás, aprovechando las oportunidades competitivas y diferenciadoras que tiene la comuna y que no sea seguir mirando sentado como las oportunidades no están distribuidas equitativamente, porque a mayor vulnerabilidad menores oportunidades reales existen para desarrollar sus habilidades y talentos. Esto, ya que a menudo enfrentan barreras socioeconómicas que dificultan su acceso a actividades extracurriculares, buena alimentación y apoyo a su desarrollo personal y orientación vocacional.

Por eso es muy necesario comprender que la educación es un sistema complejo de gestión que está regulado con leyes, normas, reglamentos y certificaciones que son muy necesarios para alcanzar logros significativos y transformadores en los niños y futuros jóvenes de la comuna, partiendo por el desarrollo de sus habilidades, talentos y luego nutriendo su conocimiento y habilidades técnicas, para que podamos tener jóvenes con un mejor futuro laboral.

¿Qué sacamos de habitar en la idílica comuna de Pucón, rodeada de naturaleza exuberante y aguas cristalinas, sino aprovechamos la oportunidad única para forjar un futuro más brillante para los residentes más pequeños? Detrás del escenario paradisíaco de Pucón hay un lado invisible que crece de forma explosiva. El aumento de la población local que se ha duplicado en una década, muchos niños y jóvenes que sienten amenazado su bienestar y futuro por falta de cupos en colegios y liceos y falta de oportunidades laborales una vez egresados de la media. 

La fuerte estacionalidad de sus ciclos económico productivos con alta dependencia al turismo, con un promedio bajo de rentas para trabajadores, va generando una alta rotación de personal y un mercado laboral muy inestable. Reconocer y abordar estos desafíos es una tarea difícil que requiere abrir los ojos y tomar conciencia, además de entender los cambios y adaptarse para el futuro, porque hoy solo vivimos del turismo y necesitamos desarrollar nuevos campos de empleabilidad aprovechando el lugar donde estamos.

Debemos sostener en el tiempo la calidad de vida de los niños en Pucón y para eso no es malo orientar los focos de los proyectos educativos municipales hacia nuevos campos productivos que nos garantice un egresado de educación municipal innovador con potencial nacional e internacional en diversos ámbitos del conocimiento, deporte, turismo, salud, tecnologías y energías renovables.

El camino hacia un futuro prometedor comienza en las salas de clases y esas salas de clases deben ser talleres del “aprender haciendo”. Es imperativo fortalecer la infraestructura educativa en Pucón orientada a ampliar la oferta de educación media municipal con especialización en nuevas áreas como tecnología y robótica, salud, energías, además vincular nuevas carreras técnicas en la Ufro desde la demanda municipal, también invitar a otras universidades a participar con propuestas de CFT, IP o proyecto universitario, para compatibilizar las demandas de formación con los propios requerimientos de profesionales que la comuna, Chile y el mundo necesitará en estos ámbitos.

En Pucón debemos marcar la diferencia con un sello estratégico, mejorando los programas de nutrición en las escuelas, liceos y espacios comunitarios públicos para garantizar que los niños reciban comidas balanceadas en carbohidratos y proteínas que nutran su crecimiento físico y mental según su contextura fisiológica. Al invertir en alimentación, también estamos invirtiendo en educación.

De la misma manera seguir potenciando y fortaleciendo con todo lo que está desarrollando el DAEM de Pucón con la posibilidad de intercambio de estudiantes con Nueva Zelanda, así potenciar con también con otros países. Establecer programas de vinculación nacional e internacional para promover una cultura comunal de educación que integre los intercambios internacionales de estudiantes para pasantías, prácticas profesionales, viajes de estudio, y otros. 

Tenemos que mirar otras áreas de desarrollo y posibilitar que los niños exploren oportunidades reales tomando en virtud mucho de lo de hoy son los egresados del liceo de Hotelería y Turismo, el mejor ejemplo de formación activa con mirada en la empleabilidad ¿Por qué no ampliar esa experiencia y metodología al desarrollo de nuevos liceos de especialización comunal para el futuro laboral de la comuna? Posibles ámbitos del conocimiento para explorar: deporte, turismo, salud, tecnologías y energías renovables.  Que las familias que decidan vivir y educar a sus hijos acá es porque hay una visión de proyecto educativo municipal atractivo para el futuro laboral de sus hijos.

Desde el mejor científico en hidrógeno verde, el campeón mundial de trail running, el seleccionado en la ráfting para el mundial, un técnico en geriatría, un guía que subió al Everest, el que creó el Black Forest. En fin, que desde Pucón exista un visión formativa respecto a las propias demandas laborales presentes y futuras que serán efecto de la transformación social y los cambios demográficos y poblacionales que se viven en el presente.

Si queremos trabajar por mejorar la calidad de vida de los niños en Pucón a través de la educación tenemos que entenderlo como una decisión comunitaria y de foco en la inversión municipal y en la postulación a proyectos del Gobierno Regional y los distintos ministerios sectoriales. Cada paso que se tome para invertir en el bienestar y el desarrollo integral de los niños fomenta el camino hacia un futuro lleno de posibilidades.

*Sebastián Álvarez fue concejal, director de Sernatur regional, diputado y actualmente es precandidato a la alcaldía de Pucón.