Histeria generalizada por información falsa marca tercera jornada de Alerta Naranja en el Villarrica

• Audios de Whatsapp que apuntaban a una eventual Alerta Roja y a una erupción ya en camino fueron la tónica por algunas horas; pero luego fueron desestimados por las autoridades y expertos. Las clases suspendidas se extienden hasta el lunes. El volcán registró un pulso de ceniza y temblores que se pudieron sentir a varios kilómetros del cráter. 

Una de las ventanas de la caseta que tiene Conaf en la ruta al volcán (al límite de la zona de exclusión de 8 kilómetros desde el cráter) está suelta deliberadamente. La idea es que funcione como una especie de sensor artesanal de los movimientos del volcán. Y a partir del mediodía este “instrumento” mostró su eficacia. Comenzó a vibrar y sonar con rangos de tiempo muy cortos. Y esto llamó la atención de los guardaparques, los Carabineros y algunos vecinos del sector que llegaron hasta el lugar (fotografía que ilustra esta nota). El antecedente se unió a la pulsión de cenizas que el macizo tuvo pasadas las 7:30 hrs de la mañana; el que actuó casi como presagio de que sería un día largo y muy complejo. En rigor, la tercera jornada desde que se decretara la Alerta Naranja por parte del Sernageomín.

Pero más allá de las manifestaciones del volcán, comunes según los expertos para la alerta que rige a la montaña; lo peor del día sucedió a eso de las 16 horas. Una especie de histeria colectiva se comenzó a apoderar de alguna forma de la comuna: los audios de Whatsapp viralizados hablaban de una inminente “Alerta Roja” y un proceso de erupción que ya estaba en progreso. Eso hizo que algunos teléfonos se saturaran y más de alguien comenzara una evacuación que nadie ordenó. Pero los audios y la inminente “Alerta Roja” que —supuestamente— se daría después de la reunión del Comité de Gestión de Riesgos y Desastres (Cogrid) regional que se desarrollaría en la municipalidad, eran falsos. Una “fake news” que las redes sociales ayudaron a levantar y que comenzó a diluirse luego de conocido el informe del Reporte de Actividad Volcánica (RAV) del mismo Sernageomin que planteaba que la alerta seguía en color “naranja” y que, incluso, si bien los parámetros estaban alterados y altos, por segundo día seguido tendían a una estabilización.

Luego vino la pauta de prensa luego del Cogrid. Ahí, frente a la prensa nacional estuvieron el delegado presidencial, José Montalva; la directora de Senapred regional, Janet Medrano; el gobernador, Luciano Rivas y el alcalde Carlos Barra. Todos, de alguna manera, reforzaron la la idea de que la “Alerta Naranja” estaba vigente y que, por ahora, no se pasaba a la roja, la que en los hechos es una erupción inminente. Pero había más. También se conoció que en Pucón las clases seguirán suspendidas —al menos— hasta el lunes y que ese día se haría un análisis sobre cómo se avanzaría con el calendario de recuperaciones. 

También se habló de las familias que se encontraban dentro de la zona de exclusión de ocho kilómetros decretada por Senapred. Se dijo que en total eran 27 familias y que el 60% de ellas (16) decidió salir. En todo caso el dato tenía algunos matices. LVP pudo verificar que el equipo municipal catastró 22 casas dentro de este perímetro y que 12 de ellas estaban habitadas. En total son 21 personas las que permanecen en estas viviendas. A los que decidieron quedarse se les solicitó que firmaran un documento de exención de responsabilidad en caso de que ocurra una erupción y que por ella los firmantes sufran algún problema mayor. 

Vulcanólogo

Algunos minutos después de la conferencia de prensa, el geólogo y vulcanólogo del Sernageomin, Franco Vera, se dio un tiempo para hablar con LVP en un Live de Facebook. En la entrevista explicó el significado de la Alerta Naranja y fue enfático en señalar que es imposible proyectar la evolución del volcán. Es decir, puede dispararse a una erupción mayor (Alerta Roja) como en marzo de 2015 o, por el contrario, puede bajar sus niveles y volver a una Alerta Amarilla como ocurrió en septiembre de 2019.

“La tranquilidad para la población es que tenemos el volcán más monitoreado de Chile con monitoreo 24/7, por lo tanto hay equipos midiendo la actividad y hay personas a tiempo completo trabajando para determinar si se ven las señales. Hay un sistema completo para generar la prevención y la educación en la población”, sostuvo Vera. 

Por la tarde un equipo de TVN estuvo en una de las termas de la zona para dar cuenta que las temperaturas de las aguas habían subido seis grados. Si bien el antecedente, según Vera, es manejado por funcionarios del Sernageomin, el vulcanólogo prefirió no establecer una relación directa entre el fenómeno y la actividad volcánica sin antes conocer los antecedentes y datos de manera más formal: “Hay que evaluarlo responsablemente con todos los datos sobre la mesa”.