Familia de Los Nevados sufre violento asalto: banda armada irrumpió en la casa y atacó a una madre y a su hija

• Un grupo de cinco encapuchados llegó cerca de las 20 horas, golpeó y maniató a las mujeres para llevarse un botín cercano a los cinco millones de pesos. Carabineros investiga el hecho. “Entraron amenazando ‘te vamos a matar’. A mi hija la arrastraron del pelo por el pasillo, la tiraron a la cama”, cuenta el padre y esposo de las víctimas.

Pudo ser una de esas tardes de campo donde el frío y el clima complejo obliga al encierro junto al fuego y, si se puede, degustar algo rico y calórico. Pero para la familia Ibáñez Castro no fue así. Eso, porque estos residentes de Los Nevados en Pucón sufrieron un capítulo más del mal actuar de los delincuentes que a menudo golpean la zona. Vivieron cerca de ocho minutos que se hicieron demasiado largos en un asalto perpetrado este sábado por un grupo de, al menos, cinco personas encapuchadas y armadas que se llevaron un botín —luego de golpear, amarrar y encerrar a sus víctimas— de unos cinco millones de pesos. 

De acuerdo al testimonio de Luis Ibáñez (51), en la casa de la Parcela 63 estaban su mujer Katherine Castro (51) y la hija de ambos Gabriela de 23 años. Él no estaba debido a que estaba en Pucón en algunos trámites El reloj marcaba las 19:50 horas. “Mi esposa cuenta que estaba acostada viendo televisión cuando mira hacia afuera por la ventana y observa a alguien. Pensaba que era el pololo de mi hija. De repente siente que le pegan una patada a la puerta y entran estos tipos con pistolas”, dice Luis, quien luego agrega: “Entraron amenazando ‘te vamos a matar’. A mi hija la arrastraron del pelo por el pasillo, la tiraron a la cama. Y mi esposa por supuesto que defendió a su hija. Y ahí la golpearon y la patearon. Seguían con ‘el te vamos a matar’, le decían también ‘entrega la plata, entrega la plata’. Y nosotros ¿qué plata?”. 

Luis dice que en total, dentro de la casa, había cinco personas encapuchadas. Dos de ellos con pistolas, los otros tres con cuchillos. Según el testimonio, uno más quedó en el auto que estaba estacionado a unos cien metros de la casa. Todos se escuchaban como personas jóvenes. Los dos perros guardianes que poseen, tampoco hicieron mucho debido a que igual fueron golpeados por los atracadores, Dentro de la casa, la situación se tornó muy compleja. “Mi esposa forcejeó con ellos, le pegaron el revólver en la cara. A las dos las amarraron y las dejaron en la pieza. Estuvieron como ocho minutos”, recuerda.

Sobre el botín, Luis dice que se llevaron joyas de oro, teléfonos, ropa, zapatos y otras especies: “Deben ser más de cinco millones de pesos”. Probablemente los delincuentes habían estudiado el lugar y a sus habitantes, debido a que solicitaban y nombraban elementos específicos propios de las víctimas (como el color de cartera de la mujer).

Cuando los delincuentes abandonaron el lugar, la hija se pudo desatar y fue en busca de auxilio donde una vecina. Desde ahí llamó a Luis y a Carabineros. Tanto la policía uniformada como el progenitor llegaron casi juntos a los pocos minutos al lugar de los hechos. La investigación por ahora la debe realizar la SIP de Carabineros.

Sobre los efectos en la familia, el miedo es el denominador común: “Mi hija y mi esposa están demasiado asustadas y nerviosas, con muchos dolores. No hay nada qué hacer, solo esperar qué soluciones dan la policía y las autoridades. Tengo una hija psicóloga y estamos viendo por ese lado”.