Connect with us

Actualidad

Rodrigo Ortiz y la posibilidad de volver a ser el Administrador Municipal: “Voy a tomar la decisión de quedarme o no después de que converse con el alcalde”

Publicado

en

El funcionario que dio vuelta vía proceso judicial la decisión que lo removió de su cargo en diciembre del año pasado, habló con La Voz… luego de que los mismos concejales que lo removieron tuvieran que aprobar los dineros para pagarle los meses que estuvo fuera. Hace un recorrido por el proceso que vivió y asegura que quedarse al interior de la administración pública local fue una buena alternativa. Niega además las acusaciones  sobre las que se argumentó para sacarlo. 

EVALUACIÓN.- Rodrigo Ortiz hace una buena evaluación del actual administrador, Carlos Olave, dice que si bien son estilos diferentes, Olave tiene las competencias y liderazgo necesario para el cargo.

Rodrigo Ortiz (51), por decirlo de alguna manera, está recién “viendo la luz” en un proceso que para él partió el 29 de diciembre del año pasado y que lo sacó de su cargo de administrador municipal por la vía de la remoción de una mayoría del concejo. Ahora, diez meses después, cuando el agua que pasó bajo el puente fue la suficiente como para devolverlo a su cargo vía acción de la justicia; está dispuesto a hablar. Y lo hace horas después de que los mismos concejales que los apartaron, aprobaron una modificación presupuestaria para pagarle los más de $30 millones por los meses que estuvo fuera. Toda una vuelta de página en un libro que aún no termina de escribirse.

— ¿Cuál es la evaluación general que haces de lo que sucedió?

“Desde la perspectiva de todo lo que uno ha planteado desde el 29 de diciembre a la fecha, creo que uno tiene que estar tranquilo por haber actuado de la mejor forma posible. Y creo que fue una de las causales de las acciones que se siguieron en su minuto. Yo no iba a dejar que se planteara algo sobre mi persona sin poner mis puntos de vista sobre la mesa”.

— ¿Cómo viviste ese día de la remoción?

“Eran más de las dos de la tarde y estaba en colación. Y fue en ese minuto que se me informa que se estaba en el proceso (de remoción) y lo viví on line. Estaba almorzando en la casa”.

— ¿Y cómo te pegó en ese momento?

“Uno lo percibe como es. Se estaba tomando una decisión sobre tu persona y, obviamente, eso convoca a reunirse con la jefatura y abordar el tema. A mi me llaman colegas que estaban viendo y siguiendo la sesión de concejo. Me pilla desprevenido porque no es un hecho del que uno se espera enterarse por la prensa”.

— ¿Tenías señales de que esto podía pasar?

“La verdad es que no. No, porque entenderás que uno venía conociendo al concejo municipal. Entregándoles toda la información desde un principio y poniéndose a disposición para que conocieran la realidad a la cual ellos se iban a enfrentar. Veníamos de un proceso pandémico donde tuvimos que hacer un ajuste económico no menor y obviamente la perspectiva desde fuera del municipio podía ser totalmente distinta una vez que conocieran la realidad. Por lo tanto era un hecho que no se esperaba y creo que a todos nos pilló… fue una situación inesperada, pero obviamente se toma con el profesionalismo que corresponde al rol que uno está entregando”.

— ¿Tuviste muchas diferencias con los concejales entrantes por asuntos determinados?

“Creo que era normal. Uno tiene que entender que no siempre se puede dar en el gusto o tomar las decisiones bajo la mirada de una sola persona, siempre se ve el contexto. Por lo tanto, no creo que haya habido algo particular”.

— ¿La salida la tomas como algo gatillado desde el punto de vista técnico o político?

“Me quedo con uno de los comentarios, no recuerdo de quién, que ‘no era hacia la persona’, pero sin embargo creo que más que técnico tenía un fin más político desde la perspectiva de que habemos muchos en el municipio que somos de cargos de confianza de la autoridad y, obviamente, somos el punto de disparo de muchas situaciones que a lo mejor a la gente o a la política no le gusta”.

— ¿Te faltó ‘muñeca política’, tomando en cuenta que tienes un perfil profesional asociado a lo técnico y a los números que la fineza política y que tu cargo tenía un toque político al depender de los concejales?

“Creo que hay muchas cosas que técnicamente se pueden justificar, independiente de la parte política. Cuando el fin es el beneficio general, la parte política en los años que me ha tocado liderar equipos de trabajo, siempre va a la par con la parte técnica. En cierto modo hay un proceso de conversación”.

— Pero la configuración de este concejo era muy diferente a todos los anteriores, hay un bloque muy definido de oposición y tiene, al parecer, un peso técnico mayor…

“Creo que en el corto período que pude estar en la mesa con los nuevos concejales, tampoco puedo opinar si era más técnico o menos técnico. Creo que ese es un rol tendrá que evaluar la autoridad comunal”.

— Pregunto porque quiero saber si hay algún tipo de autocrítica al no haber cultivado un perfil un poco más político con ellos.

“Vuelvo a lo mismo. Más o menos político no sé si sea la situación. Yo me acerqué a los concejales y me puse a su disposición que fue la instrucción que nos dio el alcalde de poner todo lo que esté de nuestra parte para que ellos se incorporaran a la gestión pública o municipal, pero en ningún minuto fue tema lo político”.

— ¿Si te tocara repetir esa experiencia actuarías de la misma manera?

“Uno de las experiencias aprende nuevas cosas. Uno trata de ser lo más abierto posible para entregar temas en lo profesional. Desde un principio estuve dispuesto a entregar capacitación y aclarar cualquier duda que ellos tuviese. Pero creo que no soy yo el que tiene que evaluar cuál fue la causal. Creo que no es mi rol hoy preguntar eso”.

— Y de los argumentos de fondo que se dieron: el supuesto desorden administrativo, los no pagos de Magisur y otros temas que estaba en un informe de Contraloría; ¿hay responsabilidad de tu parte? ¿Se pudieron hacer mejor las cosas? ¿Hiciste cosas mal? ¿Fuiste poco riguroso?

“En general siempre se hicieron las cosas apegadas a la norma. No logro entender lo de Magisur, siendo que el que hable fue el primero que le hizo cobros administrativos a la empresa. Temas de cosas mal hechas; las veces que tuvimos revisiones de la Contraloría las observaciones son de carácter normal en situaciones que no siempre se cuenta con el aparataje administrativo para hacer las cosas. Hay varios informes de la Contraloría que traen observaciones que se aclararon en su minuto y que no dieron mérito a ninguna acción de algún tipo, más allá que se hicieran muchas denuncias anónimas que la misma Contraloría desestimó en su minuto porque no tenían asidero ni fundamento para ser investigadas. Este municipio creo que se puede jactar por la buena convivencia que se ha llevado en toda su magnitud, es un municipio que está relativamente ordenado. Fue evidencia para el concejo anterior que pudimos entregar un municipio saneado con números azules que no siempre se puede dar en una municipalidad del tamaño que tiene la municipalidad de Pucón”.

— Volvamos al período en que esto sucedió, ¿cómo evalúas la reacción de tus colegas que estaban más relacionados al proceso de remoción? Me refiero al Control, al jefe Jurídico de la época y al Secretario municipal de la época.

“Creo que es complejo poder opinar de los pares. Y vuelvo a lo mismo. Uno, en el contexto en que se da esta situación, yo no me puedo referir a lo que pasó en la sala de reuniones porque no estaba…”.

— … Pero viste la grabación.

“Cada uno opinó de acuerdo a lo que correspondía y cada uno es responsable de dar su opinión y hacerse cargo de sus dichos”.

— ¿Fue acertado quedarse trabajando en la municipalidad luego de tu salida y en medio del proceso legal?

“Yo tenía que quedarme. No por capricho u otra cosa, sino que para demostrar que no tengo nada que esconder. Creo que finalmente, como todo ser humano, podemos cometer errores, pero esos errores pueden ser administrativos que tienen una corrección con otro hecho administrativo. Yo no tenía que arrancar de nada. Por qué me iba a ir”.

— ¿Tuviste opciones de irte a otro lado?

“Las opciones siempre han estado, pero yo tengo un compromiso con don Carlos (Barra). Un compromiso con su gestión. Él me invitó a ser parte de eso y la mejor forma de demostrar que se hicieron bien las cosas es estando de frente y en ese sentido la decisión de haberse quedado fue la correcta. Además, siento que lo que puedo aportar y lo que he estado aportando paralelamente en la gestión que he estado haciendo; tengo la certeza de que mis colegas lo reconocen y en ese sentido estoy tranquilo”.

— ¿Fuiste el administrador en las sombras en este tiempo?

“La verdad es que no. Todo lo contrario. Siempre la intencionalidad fue que la persona que suma pueda tomar sus propias decisiones y yo pueda colaborarle desde la perspectiva profesional al alcalde. Obviamente por algo lo puso porque él (el actual administrador) tiene las competencias para hacerlo”.

— ¿Cuál es tu evaluación del actual administrador Carlos Olave?

“Creo que él tiene las competencias y que es capaz de liderar el municipio. Podemos tener distintas visiones de cómo hacer las cosas, pero creo que no está errado tampoco en lo que está haciendo. Reitero, jamás he estado detrás y me he puesto a disposición si él necesita alguna sugerencia o colaboración, pero finalmente me he enfocado en hacer el trabajo que se me ha solicitado y no me he involucrado en absolutamente nada en la administración del municipio”.

— ¿Conversan? ¿Hay comunicación?

“Sí, pero todo vinculado a lo que estoy realizando ahora”.

— ¿Qué viene ahora respecto a tu labor? Técnicamente te tienen que reintegrar y pagar. ¿Vas a volver a tu labor? ¿Qué va a pasar ahí?

“No me quiero adelantar respecto a lo que voy a hacer…”.

— … Pero me imagino que tienes una decisión tomada.

“Es un tema que todavía no he podido conversar con la autoridad comunal. No lo he conversado con don Carlos (Barra). Por lo tanto es un tema que tengo que conversarlo con él. No hay que olvidarse que este ciclo se cierra una vez que se le notificó al tribunal que se dio el cúmplase. El municipio tiene que informar el proceso cerrado y eso se cumple el miércoles. Lo primero que compete es tener esta reunión con la autoridad, que se termine el proceso administrativo que corresponde y después que converse con él veré qué hago”.

— Pero más allá de que lo digas, ¿tienes una decisión tomada?

“La verdad de las cosas es que voy a tomar la decisión de quedarme o no después de que converse con el alcalde”.

— ¿Tomando en cuenta que te puedes exponer nuevamente a un proceso de similares características porque el fallo de la Corte y la Suprema no habla del fondo, sino de la forma en cómo se hizo y probablemente los concejales, si es que vuelves al cargo, quieran sacarte de la forma adecuada?

“Siempre existe el riesgo o la oportunidad. Yo pretendo reunirme con don Carlos y una vez que converse con él voy a zanjar las decisiones que pueda tomar, pero claramente siempre va a ser en pos del buen desarrollo de la administración”.

—- Y en pos de ese “buen desarrollo de la administración”, ¿te expondrías a una situación similar?

“Pero el que nada hace, nada teme. Creo que para algunos hay fundamentos, pero para otros no son fundamentos; pero finalmente es una decisión que voy a tomar cuando se cierre este proceso y tenga la reunión con el alcalde”.

— Ahora te queda la posibilidad de perseguir civilmente a los concejales que te sacaron o a las personas que propiciaron esta situación. ¿Es una decisión que tienes tomada o descartada?

“La verdad es que no es un tema que se haya abordado. En este minuto no te puedo adelantar nada porque es un tema que ni siquiera hemos conversado con los abogados. La verdad de las cosas es que lo que se buscaba era demostrar que se había hecho mal algo y creo que eso ya se cumplió”.

— ¿Tuviste asesoría del partido del alcalde, Renovación Nacional?

“No. tengo la asesoría de una abogada (Jocelyn Ortega) de Santiago que se ha portado muy bien conmigo y tampoco le he preguntado si milita o no”.

— ¿Qué te queda después del proceso?

“Creo que lo más complejo es poner paños fríos al entorno más cercano. La familia en general confía, pero no falta la mala intención. Creo que ahí fue fundamental el apoyo del grupo más cercano. Los hijos, y yo los tengo adolescentes, pueden saber mucho de su papá, pero cuando el comentario va mal intencionado, obviamente, también tiene un efecto sobre ellos. Tengo a mis padres vivos que les llegaron comentarios y son de una educación a la antigua. No entendían nada nada y había que explicarles el proceso normativa. Y ahí está el peor sufrimiento. Ver a los padres, ya de edad, tratando de entender esta situación política. No es lo mismo ver en la prensa cómo se pelean los políticos en Santiago con una situación que les afecta directamente a ellos”.

— ¿Crees que hubo mala intención en todo esto?

“Yo espero que no. Sí claramente hubo muchas denuncias anónimas a la Contraloría que buscaban acusar especialmente a mi persona, lo cual involucraba a la familia. Incluso mezclaban similitudes de apellido para relacionarme con empresas grandes del país. Cosas que la misma Contraloría desestimó en varias ocasiones. Creo que ahí había mala intención. Ahí puede llamar la atención que sobre un mismo hecho se denuncie tres o cuatro veces. La denuncia puede haber venido de un mismo lugar”.

— ¿Sale fortalecido el alcalde políticamente después de este proceso?

“Creo que el alcalde nunca ha perdido su liderazgo. Creo que más allá de los titulares de prensa, él tiene un espacio ganado que, a mi perspectiva, se lo merece. Creo que he tenido la satisfacción de acompañarlo a reuniones donde grandes políticos han reconocido la gestión de Carlos Barra. Por lo tanto, puede que haya una sensación de que efectivamente pueda considerarse validado desde la perspectiva de la gestión. El equipo del alcalde es un equipo comprometido. Siempre lo fuimos. Buscamos siempre el bienestar de la comunidad por sobre cualquier cosa y eso puede que algunos quisieran que llegaran más beneficios, pero tenemos varias situaciones que tienen que ver hasta dónde llegan los brazos del servicio público y qué es lo que le corresponde o no le corresponde”.

— Tú eres un hombre de números, pero en los hechos habrá que pagarle a dos administradores por casi diez meses. Se duplica. Son $38 millones multiplicado por dos. ¿Quién crees que debería responder por esto, ya que es algo irregular y son recursos estatales?

“Finalmente es una situación que tendrá que dilucidar el ente que nos supervisa a nosotros que es la Contraloría. Creo que cada hecho tiene sus instancias para determinar el procedimiento que hacemos”.

— ¿Corresponde un juicio de cuentas para dilucidar responsables?

“Lo que yo pueda decir, puede instar a opiniones que a lo mejor no son convenientes en este minuto. Creo que la autoridad y los asesores que tiene el alcalde hoy tendrán que evaluar qué es lo que corresponde”.

Concejo extraordinario

La mañana de este lunes se llevó a cabo un concejo extraordinario en el que se aprobó la modificación presupuestaria para poder pagar a Rodrigo Ortiz los meses que estuvo fuera de su cargo. Esto es parte del fallo de la Corte que se debe cumplir. Lo otro es reintegrarlo a su cargo antes del miércoles. En la reunión se abrió la posibilidad de iniciar una investigación sumaria para buscar responsables y también de consultar a la Contraloría si es que corresponde pagarle todo el sueldo o la diferencia entre lo que recibiría como administrador, menos lo que recibió en el cargo que se desempeña actualmente como encargado de los servicios transferidos de Educación y Salud. Por otro lado, el concejal Cristian Hernández también planteó que se debería consultar al organismo contralor si correspondía un juicio de cuentas para que los responsables de la salida de Ortiz (eventualmente los concejales que propiciaron su remoción) puedan responder personalmente por el dinero.

Comenta la noticia
Metanoia TV