Municipalidad licita furgón para dializados a la misma empresa que incumplió con el servicio en 2019

El problema recrudeció porque compañía que ganó la concesión ofreció un vehículo nuevo y llegó este 2020, según denunciaron usuarios, con el mismo móvil cuestionado por falta de implementación que usaban el año pasado.

El pasado 5 de diciembre ocurrió un hecho trascendental para un grupo de pacientes puconinos con necesidad de dializarse. Ese día la municipalidad de Pucón definió terminar el contrato con el prestador de servicio de transporte de los enfermos. Y, entre las razones que se argumentaron en la carta, estaban déficit de personal, equipamiento y servicio. Eso en lo formal, porque en los hechos la atención, según los mismos pacientes, dejaba mucho que desear. Incluso se manejaron denuncias que iban desde que el furgón utilizado no cumplía con los estándares mínimos para el traslado hasta el manejo precario y a veces en dudoso estado del conductor.

El tema, que incluso fue ventilado en concejo municipal, terminó en la misiva que cortaba anticipadamente la relación entre la empresa Transporte Esperanza, cuyo representante legal es Cristian Quiroz y la municipalidad. Y este último organismo tuvo que volver a licitar, pero para sorpresa de muchos, a fines de diciembre de 2019 se conoció que el ganador del concurso público era… la misma empresa que había perdido la concesión semanas antes: Transporte Esperanza o SurTrans, nombre que ocupan publicitariamente (al menos así está ploteado el furgón usado hasta el cierre de la primera concesión).

Pero cómo sucedió esto o por qué la misma empresa finiquitada se adjudica, nuevamente, un contrato de similares características que el anterior. Según el Director de Desarrollo Comunitario (Dideco), Eduardo Pino, que la empresa haya sido finiquitada de su contrato anterior, no le impedía técnica o legalmente participar de una nueva licitación. “Nosotros estábamos buscando una mejora en el servicio, pero en ningún momento le cortamos las alas a la misma empresa para que mejorara. Yo tuve reuniones con ellos para que mejoraran el servicio y la verdad es que las licitaciones que encontré cuando asumí como Dideco no me gustaron y empezaron a tener deficiencias y los pacientes de diálisis no estaban siendo bien atendidos por parte del personal y por las condiciones de la máquina que facilitaba el servicio”, explicó Eduardo Pino, quien agregó: “Eso no quitaba que la empresa volviera a postular, pero en las condiciones que hoy día nosotros indicamos en las nuevas especificaciones técnicas del servicio y hoy ofrece un furgón con mayor capacidad, cambiaron al equipo (conductor y asistente paramédico)”.

Según Pino, el vehículo que usó Transporte Esperanza durante 2019 era del año 2013 y no tenía los requerimientos técnicos mínimos para funcionar. Ahora, según la licitación, el furgón será 2019 y un equipamiento acorde que incluirá, entre otras cosas, tubos de oxígeno, equipos de radio y una pisadera de desplazamiento eléctrico (rampla), clave para el acceso de pacientes con problemas de movilidad. La adjudicación se materializó por $2.900.000 mensuales para el empresario.

Pero el nuevo trato no partió bien. Eso, porque el servicio se iniciaba el pasado jueves dos de enero, pero el transporte no llegó. Según Pino, el tema se debió a un malentendido en las notificaciones del concurso: “Hubo un error de comunicación de parte de ellos”. Por lo mismo, la municipalidad tuvo que mandar furgones para el traslado de los cerca de 24 pacientes con la necesidad de dializarse en Villarrica. Pero el asunto empeoró en los siguientes días, ya que la empresa —según los usuarios, quienes incluso subieron un video a redes sociales— llegó con un furgón similar (en las mismas malas condiciones) al del año pasado.